En espacios reducidos, cada centímetro cuenta. Estos consejos te ayudarán a optimizar el interior de tu contenedor o módulo, combinando diseño y funcionalidad.
1. Muebles multifuncionales
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Sofás cama o camas plegables.
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Mesas abatibles y escritorios que se esconden en la pared.
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Estanterías modulares que pueden reconfigurarse según tus necesidades.
2. Almacenaje vertical
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Armarios y estanterías hasta el techo.
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Ganchos y rieles para colgar utensilios, herramientas o accesorios.
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Cajas apilables transparentes para guardar y ver el contenido fácilmente.
3. Iluminación y espejos
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Luces empotradas o tiras LED en rincones y esquinas.
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Espejos de gran formato para ampliar visualmente el espacio.
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Ventanas o claraboyas bien ubicadas para captar luz natural.
4. Zonas delimitadas sin muros
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Alfombras, cambios de pavimento o biombos ligeros para diferenciar áreas (dormir, trabajar, comer).
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Cortinas correderas que ofrecen privacidad sin sacrificar metros.
5. Colores y acabados
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Tonos claros en paredes y mobiliario para reflejar la luz.
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Toques de color en textiles o pequeños objetos para aportar carácter.
Con un poco de ingenio, tu contenedor puede convertirse en un espacio versátil y acogedor, perfectamente adaptado a tu ritmo de vida.
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